Friday, July 8, 2005

Criticas al ataque de Tom Cruise

Cartas

Miércoles 06 de Julio de 2005 / El Nuevo Día


Críticas al ataque de Tom Cruise
Por Nestor J Galarza, MD

Recientemente el actor Tom Cruise perpetró un ataque de dimensión global pero errado, en contra de la psiquiatría y en contra del uso de medicamentos que se usan con éxito hace más de 30 años.

La respuesta de la Asociación Psiquiátrica Americana no se hizo esperar. También NAMI, (National Alliance for the Mentally Ill) que despertó sus cánones, usualmente dirigidos a quienes maltratan a las personas que padecen de trastornos emocionales, en contra de las ideas de Cruise y la National Mental Health Association que se pronunció al unísono con los psiquiatras expresando que mientras respetamos el derecho de los individuos a expresar sus propios puntos de vista, ellos no conocen los siguientes hechos: Las enfermedades mentales son condiciones médicas que afectan a millones de personas en América. Los pasados cinco años, la nación más que duplicó su inversión en el estudio del cerebro y la conducta humana, llevando a una comprensión bastamente mejorada de la depresión postnatal, el trastorno bipolar y el déficit de la atención con hiperactividad.

Muchas de esta investigaciones ha sido realizadas por los Institutos Nacionales de la Salud y en las instituciones académicas más reconocidas de la nación. Se han publicado investigaciones rigurosas que demuestran claramente que el tratamiento funciona.

Los medicamentos pueden ser una parte importante e incluso salvan la vida de pacientes que están bajo plan completo e individualizado del tratamiento psiquiátrico.

La salud mental es un parte crítica de la salud general. Es lamentable que ante la realidad de este progreso notable, científico y clínico, un número pequeño de individuos y grupos persista a atacar su legitimidad. Las enfermedades mentales son sumamente tratables y el buscar ayuda es un signo de fortaleza.

Es irresponsable de Tom Cruise utilizar la publicidad de su nueva película para promover sus propias opiniones ideológicas y para disuadir a personas que padecen de enfermedades mentales de obtener el cuidado que necesitan.

Néstor J. Galarza, MD
Presidente Sociedad Psiquiátrica de Puerto Rico