Friday, May 6, 2011

Una manifestación del Universo. Muerte de bin Laden

September 11, 2001
May 2, 2011



Siempre es triste cuando alguien muere. Una manifestación del Universo, así, con mayúscula, termina y es irrepetible e irremplazable. El júbilo por la muerte de Osama bin Laden de parte del pueblo norteamericano es entendible, y quizás justificable, sin embargo no deja de entristecerme el hecho de que hay jubilo por la muerte de alguien.

Que cambia todo esto aparte de placar un poco la sed de venganza? Cuando la Mossad israelí persiguió y allegadamente elimino muchos de los responsables del atentado en Múnich en 1972 eso no redujo la actividad terrorista contra el pueblo judío. Cuando se invadió Panamá para capturar a David Noriega, eso tampoco redujo el flujo de cocaína a los EE.UU.
Muchos de nuestros jóvenes continúan batallando en tierras lejanas para defender una democracia que no entienden, que los países que los reciben quizás no quieren y quizás no necesiten. La muerte de Osama probablemente no haga que menos chicos vayan a combatir a estas tierras lejanas y que dejen de llegar con heridas visibles y no tan visibles.

Por un lado soy testigo de la historia y participo de su marea inexorable, pero por otro estoy claro que el trabajo que hacemos aquí, aunque sea un grano de arena, continúa y quizás sea aun mayor a consecuencia de todo esto. Quizás nos afecte a muchos el oír estas historias y nos preguntemos, como lo hacen algunos de nuestros veteranos, para que fue todo el sacrificio? Quizás la contestación a esa pregunta no la sepamos nunca. El para qué, quizás sea algo personal para cada cual y cada cual tiene que buscar su razón. Mi razón ahora es seguir dando el servicio que doy con amor, con entrega, con simpatía y sin juzgar. Ese es el apostolado de todos los que trabajamos el servicio a los que sufren por la causa que sea.

Meditemos sobre esto y que Dios no ilumine para hacer bien nuestro trabajo, dándonos la fuerza y el corazón para seguir haciéndolo sin que se nos muera algo cada día. Al contrario, que cada día nos sintamos más vivos y más seguros de que lo que hacemos es el trabajo que tenemos que hacer, es el consuelo de muchos, y que nos sintamos orgullosos de ello. De esa forma quizás cambiamos el mundo, un pedacito a la vez.

Carlos Aviles, MD


Las opiniones de varios psicólogos se publicaron en la prensa
http://www.nytimes.com/2011/05/06/health/06revenge.html?_r=1&ref=health